Codigorojo. 10 de septiembre 2023.
El pueblo allendista de San Luis de Macul, agrupado en el comité 50 años, inauguró este 10 de septiembre en Los Boteros con San Luis una placa recordatoria del presidente mártir.
El lugar es donde hace 53 años, el comité local de la UP recibió a Salvador Allende como candidato a la presidencia que finalmente gano el 4 de septiembre de 1970.
La actividad contó con la presencia de dirigentes sociales del sector, militantes de los partidos de la UP, del Colectivo Francisco Bilbao, colectivos culturales y pobladores que se sienten allendistas.
Pablo Abrego recordó, una a una, las 40 medidas de la UP, saludo a los presentes y Juan Puente, vecino, integrante del Colectivo Francisco Bilbao entregó la opinión del comité.
Silvana, vecina, escultora, confeccionó la placa en cerámica tratada para no ser dañada.
Discurso de Juan Puente.
Los dirigentes culturales, sociales y políticos de San Luis, que hoy nos agrupamos de forma voluntaria y consciente, para conmemorar los 50 años del golpe de estado cívico militar, que para nosotros y una inmensa mayoría, es una fecha de dolor que aun nubla nuestro pasado y presente.
No obstante, nuestro futuro lo vemos lleno de esperanzas y de cambios, ya que el no olvidar la historia y sus forjadores, nos permite tener siempre presente sus grandezas y sus logros, para continuar con sus ejemplos …También la historia y la memoria nos permite conocer a sus detractores.
Un país, un pueblo, un barrio, una población sin historia, carece de identidad. No tiene esencia, no conoce de trabajos y esfuerzos en conjunto, no sabe de comunidad.
Nuestra población San Luis, tiene historia de logros de esfuerzos propios y de esfuerzos colectivos. Sabe del trabajo en conjunto de los comuneros, y sabe que el resultado del esfuerzo en conjunto de los pobladores es el bien común como resultado…Sin duda. La Unidad Hace la Fuerza.
Para nosotros vecinos y pobladores de San Luis, este no es un día de fiesta; éste es un día de recuerdo, de rememoración. Un día para mirar hacia atrás, no en el afán de retroceder, no para estancarnos en el pasado, sino para rendir un homenaje a todos aquellos que, con el esfuerzo del trabajo por la conquista de los derechos sociales hicieron más grande su barrio, su población, su ciudad y nuestra patria, nuestro pueblo.
En este mismo lugar donde estuvo El Compañero Candidato en el año 70 y posteriormente presidente de la República, Salvador Allende, quien desplego su campaña electoral a lo largo de todo chile y principalmente en los sectores más populares de aquel entonces.
Aquí en estos alrededores permanecen los recuerdos vivos de muchos vecinos, donde el compañero candidato, estuvo con los comuneros, entro a sus casas, compartió el pan y la once en un ritual de armonía, estuvo como un igual entre sus iguales y no se distinguía entre los otros, porque los otros eran el, se sentó en las mismas sillas que todos usaban a diario, converso de los temas más simples y diversos, se informó de la historia de las loteos 1°,2°,3°y4° comunidad, levantadas con esfuerzo propio y su autoconstrucción.
Su discurso dirigido a los vecinos, lleno de claridad hacia el futuro, lo entregaba desde la plataforma de un viejo camión Ford …. de apoyo la candela del poste de alumbrado público.
Allende no necesitaba más que su claridad y elocuencia, carisma y principios …La lealtad con los suyos.
No queremos hablar de toda su historia política, social, académica, profesional. Ya que muchos le han enaltecido a tal envergadura, que lo hacen inalcanzable entre los suyos. Allende es el continuador de la historia de resistencia y de independencia que ha dado nuestro pueblo y nuestros próceres desde la invasión española.
Queremos estar y hablar del Allende de todos…. De los niños, de los jóvenes, de las mujeres y hombres de esfuerzo, con el Allende que vive aún entre nosotros.
Con ese Allende que para golpear su frente limpia de pesadillas, tuvieron que convertirse en pesadilla.
Tuvieron que congregar todos los odios y además los aviones y los tanques.
Tuvieron que bombardearlo, hacerlo llama, porque Allende era una fortaleza.
Tuvieron que desatar la guerra turbia para vencer al hombre de la paz
y acallar su voz modesta y taladrante.
Estamos aquí en este día que tiene una profunda y honda significación; que es trascendente porque están aquí ustedes, niños, jóvenes, mujeres, hombres y la más amplia diversidad, para honrar su memoria y vuestras memorias y testimonios, cientos de historias y vivencias, de las cuales muchas fueron quemadas u ocultadas, por el temor a la felonía.
Pero la historia es nuestra, porque nosotros la hacemos y la construimos, somos legítimos herederos los padres y madres de la patria, como también de los forjadores de esta población iniciada por cuatro comunidades.
Nuestro sentido de pertenencia a nuestro barrio hace que ella nos pertenezca y aspiramos que este espacio donde estuvo el compañero Salvador Allende, en su campaña presidencial el año 70, no solo lleve una placa recordatoria en su homenaje como hombre digno. También deben estar grabados los nombres de los comuneros que aportaron en su fundación, al crecimiento y desarrollo.
Ellos, los que fueron parte activa del trabajo colectivo, para sacar a nuestro barrio de la indigencia rural de estos asentamientos llenos de ñuños, construyendo mano a mano con sus esfuerzos, las primeras redes de alcantarillado, de agua potable, las primeras veredas peatonales en aquellos callejones, para luego el empedrado de los mismos. Todo tuvo esfuerzo físico y económico para un mejor vivir en comunidad.
También es de importancia la generación presente, donde han existido relevantes actores sociales que han aportado en romper la indigencia cultural, organizados en clubes deportivos, juntas de vecinos, clubes del adulto mayor, centros culturales de música, baile, literatura y muchos más. Su aporte social debe ser reconocido y no olvidado. Aquí deberán estar grabados sus nombres como testimonio y agradecimiento de sus vecinos.
“Sin memoria, no hay historia, sin historia no hay verdad, ni pasado”.
Queremos que todos sepan del esfuerzo colectivo de la creación de nuestras comunidades y permanezca en el futuro, para que las actuales generaciones y venideras sientan orgullo de nuestro territorio, sientan pertenencia y más aún sientan que les pertenece cada espacio de la población.
No queremos y nadie debiera aceptar que estos espacios al igual que otros, sean propiedad de la narco cultura, o de delincuencia. Queremos espacios limpios, seguros, queremos cultura y buen vivir en nuestro territorio.
Queremos estos espacios libres de banalidad e insignificancia… Mucho hicieron nuestros pioneros y queda más aun por hacer desde distintas organizaciones sociales o culturales, con el ejemplo de la autogestión y la autodeterminación.
No podemos solamente esperar que las autoridades de turno nos lo den o lo construyan. Ejemplos tenemos de sobra la importancia de estar organizados para el bien común y que estos estimulen el desarrollo de fuertes movimientos sociales para retomar el hilo conductor del movimiento social y popular en vistas al futuro y no de mera evocación nostálgica.
Sigan ustedes sabiendo que, mucho más temprano que tarde, se abrirán las grandes alamedas por donde pase el hombre libre para construir una sociedad mejor» …
Aunque mil años años toquen este sitio. No borraran la memoria de los que aquí estuvieron y estarán.
Aún Tenemos Patria..
Viva San Luis.
Viva Chile.—-
Viva por siempre Salvador Allende