Fuente El Mercurio de Valparaíso. (17/09/21)
. “Son cifras catastróficas”, manifestó el seremi de Desarrollo Social, reconociendo una deuda estatal con la niñez. Una realidad alarmante que afecta a uno de los grupos más vulnerables ante la pobreza es la que refleja un análisis del Observatorio del Contexto Económico de la Universidad Diego Portales (OCEC UDP). Según evidencia, cerca de un 10% de los menores de edad en Chile pueden ser considerados como “pobres”, así como poco menos de un 6% entran en la categoría de “pobres extremos”. Se trata, además, de un escenario que incluso se acentúa en la región.
“Podemos concluir que hay 25.760 menores de 7 años que están en condiciones de pobreza, y hay 69.268 en esta misma categoría dentro de los menores de 18”, estima en cuanto a la situación regional Luna Bratti, investigadora a cargo del estudio. A su juicio, explica por factores que van desde el alto desempleo en la zona -bastante por sobre el promedio nacional, de acuerdo a la última Casen hasta el bajo nivel de ingresos mensuales por hogar, además del elevado índice de pobreza en relación a la población total.
“La pobreza infantil es diferente de la pobreza adulta, dado que niños y niñas tienen necesidades específicas de nutrición, salud y educación que son distintas de las que tienen los adultos”, advierte Bratti en el informe, que alerta sobre las secuelas permanentes que puede implicar crecer bajo condiciones de precariedad. Si se consideran solo los niños menores de 7 años, en la Región de Valparaíso, un 9,5% vive hoy en situación de pobreza, un 7,4% en un estado de pobreza extrema.
Además de encontrarse por encima del promedio en Chile, explica la académica, “otro tema importante respecto a Valparaíso es que -si dejamos fuera a la Región Metropolitana es la región que presenta más niños en total. Obviamente, puede estar correlacionado, pero sí uno lo ve pensando en que hay una alta tasa de pobreza en una región donde viven muchos niños, podemos decir que es una de las zonas donde deberían tener prioridad tanto la pobreza infantil como las políticas públicas para atacarla”. Consultado respecto a este estudio, el seremi de Desarrollo Social, Luis Alberto Rodríguez, no escatima en calificar la situación expuesta como “catastrófica”.
Dentro de las conclusiones del análisis, Luna Bratti llama a potenciar el uso del enfoque multidimensional -que tome en cuenta otros factores, más allá de los ingresos a la hora de medir la pobreza infantil en Chile. A raíz de eso, advierte que las cifras actuales podrían subestimar la realidad. “El número total de niños que viven en situación de pobreza multidimensional podría ser hasta el doble”, alerta, señalando que este aspecto suele quedar fuera de las políticas públicas, de la misma forma, Bratti señala que aunque puede ser fácil atribuir las altas cifras al efecto de la crisis sanitaria, la realidad parece indicar que no por este motivo. “Si comparamos los números del 2017 con el 2020, los niveles no son tan distintos. (…) En la Región de Valparaíso, particularmente, vemos que la tasa de pobreza no extrema para menores de7, en el año 2017 fue de 10,49 % y en 2020, de 9,49%: estamos hablando de que, de hecho, bajó”, dice a modo de ejemplo. “Es raro, porque, obviamente, estamos viviendo una crisis económica y todo, pero esto nos deja un mensaje súper importante: que el problema de la pobreza infantil no está fuertemente ligada a los ciclos económicos y a la coyuntura, sino que más bien tenemos un problema estructural, que es permanente y que debiésemos combatir”, finaliza.